DOVIZIOSO LLAMA A LA PUERTA

(foto: Autosport)

Los garajes de los equipos del mundial de motociclismo han vuelto a abrir sus puertas este pasado fin de semana en el Circuito de Losail de Qatar para dar inicio a la temporada 2019. Marc Márquez vuelve a ser el gran rival a batir en una máxima cilindrada que presenta atracciones como la antaño impensable llegada de Jorge Lorenzo a Honda, el resurgir de las Suzuki o la reinvención de Yamaha tras un 2018 decepcionante.

Pero en la primera carrera de 2019 ninguno de ellos ha alzado los brazos. En 2017 fue una sorpresa, en 2018 acabó creyéndoselo, y este año quiere lograrlo. "Dovi aprende muy rápido", dijo Márquez después de que el italiano cruzara el primero la línea de meta en Losail por delante del propio 93 -una victoria puesta en duda por alguno de los equipos rivales-. Triunfo forjado hasta el último segundo, en un mano a mano que cayó del lado del de Ducati, que tras dos subcampeonatos consecutivos, quiere por fin saborear la gloria del título.

Para conseguirlo, una misión de obligado cumplimiento será aprender de los errores del pasado, el más importante la regularidad. Tres abandonos en la primera mitad del curso pasado acabaron costándole mucho terreno frente al 93, que en esas citas le metió al italiano 70 valiosos puntos.

Una empresa para nada sencilla y a la que además se le une que la distancia entre su Ducati y la Honda de Márquez y la de su ex compañero Jorge Lorenzo ha aumentado con respecto al año pasado. La factoría japonesa ha solucionado una de las deudas que tenían con su gran campeón, que es la velocidad punta de la moto. A 352 km/h llegó el defensor del título en Qatar, 3 km/h más rápido que en 2018.

A Lorenzo, 13º en Qatar, también le costó empezar en Ducati. (foto: AFP)

Mejora que no solo los pilotos de HRC están apreciando, sino que también otros que montan propulsores Honda como es el caso de Cal Crutchlow, tercero en Losail, o Takaaki Nakagami, que finalizó en la novena posición.

De esta forma y aunque Lorenzo sigue acusando sus problemas físicos, Honda ha creado un gran hueco con la marca roja y sobre todo con Yamaha. El 5º puesto de Rossi -después de una gran remontada- y el 7º de Maverick Viñales -de poco le valió la pole position- parecen indicar que los de los diapasones se han quedado relegados al tercer escalafón, y con la amenaza muy presente de las Suzuki de los españoles Álex Rins, 3º en Qatar, y Joan Mir, 8º.

Rins y las Suzuki pueden acabar siendo jueces en la pelea por el mundial. (foto: motociclismo.es)

Ante tal diferencia en las monturas, el nivel de pilotaje volverá a jugar un papel fundamental en los cara a cara para decidir cada prueba y, en definitiva, el mundial. La calma de Dovi contra la agresividad de Marc, con muchos invitados especiales de por medio intentando hacerse su hueco que, sin duda, serán actores importantes en el devenir de la competición. 

Año tras año, subida de nivel tras subida de nivel, Honda se mantiene en lo más alto de la lista de los equipos de MotoGP. Una pauta que parece estar siguiendo, a nivel individual, un Andrea Dovizioso que a base de ir despacito y con buena letra está llamado a mantenerse en este 2019 como el principal rival a destronar la espontaneidad e impulsividad de Marc Márquez.