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(foto: RTVE) |
Hoy es 3 de diciembre. Irremediablemente, el tiempo de Navidad se empieza a colar en nuestras casas, y con él la hora de empezar a recordar todo lo que ha sido este año que está a punto de terminar. Este post no tiene esa ambición -que sí tendrán otros próximamente-, pero después de que la selección española Sub-17 consiguiera coronarse campeona del mundo, es inevitable no echar la mirada atrás en el que ha sido, sin duda, el mejor año del fútbol femenino español.
Este campeonato mundial que han logrado las Sub-17 es solo la guinda a un año natural fantástico para las selecciones femeninas nacionales. Cuatro torneos han disputado, y en los cuatro las españolas han vuelto a casa con una medalla al cuello, y lo que es mejor, en tres ocasiones con un metal dorado.
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En Lituania las chicas consiguieron el primer entorchado del año. (foto: RFEF) |
La primera piedra se colocó, curiosamente, con el mismo grupo de chicas que han logrado el éxito más reciente. En el mes de mayo, en el Europeo Sub-17 celebrado en Lituania, las de Toña Is se tomaron finalmente la venganza contra Alemania. Las teutonas habían sido su verdugo en las finales de 2016 y 2017, pero en 2018 no sería así. El resultado de 0-2 favorable para las españolas les permitió sumar el cuarto título continental en la historia de la Sub-17, junto a los de 2010, 2011 y 2015.
El gran nombre propio fue Eva Navarro. Decisiva en la semifinal ante Finlandia y también en la final. Con dos goles,
uno de bellísima factura, decidió el marcador y el campeonato en favor de la selección española. La jugadora por aquel entonces del Sporting Plaza Argel de Alicante, ahora del Levante, se ganó su puesto en el mejor once del torneo, donde se colaron las también españolas Ana Tejada y Paola Hernández.
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La racha siguió con las Sub-19 repitiendo Europeo. (foto: EFE) |
En julio fue el turno de la Sub-19. El seleccionador Jorge Vilda se vio obligado a prescindir de varias jugadores, con el Mundial Sub-20 a la vuelta de la esquina. Pero eso no supuso ningún problema para que, en Suiza, reeditaran el triunfo logrado en 2017. A pesar de comenzar el torneo perdiendo ante Noruega, victorias ante la anfitriona y Francia metieron a las españolas en semis.
La gallega Teresa Abelleira marcó en semifinales para derrotar a Dinamarca, y María Llompart hizo lo propio en la final ante, otra vez, Alemania.
Con un golazo de falta, la jugadora del Espanyol de 17 años entregó a España su tercer entorchado en este torneo. Por primera vez, un mismo país ganaba los Europeos Sub-17 y Sub-19 el mismo año.
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La selección nipona despertó a la española del sueño. (foto: AS) |
El gran reto llegó en agosto. Ese mes se batieron en Francia las mejores selecciones femeninas menores de 20 años, y entre ellas estaba España. A pesar de que su mejor resultado histórico era un sexto puesto cosechado dos años atrás en Papúa Nueva Guinea, las españolas llegaban con muchas esperanzas puestas en sus posibilidades.
Y no decepcionaron. Con Patri Guijarro -máxima goleadora y mejor jugadora del torneo- y Aitana Bonmatí al mando, junto a las paradas del muro de las inferiores, Cata Coll, España superó la fase de grupos, luego a Nigeria en cuartos y a la anfitriona en semifinales. En la final, la selección rival sería una Japón a la que ya habían derrotado en la primera fase.
Desgraciadamente, eso no se repitió en la final. Sin Aitana Bonmatí y sin el acierto de otros días, las de Pedro López acabaron sucumbiendo contra la puntería de las niponas, quienes supieron sufrir y tuvieron el olfato para marcar tres dianas antes del 65'. Un gol de Candela Andújar en el 71' pudo significar la remontada, si la maldita puntería se hubiera aliado con las españolas. De esta forma, la selección nacional femenina Sub-20 se colgó una plata tan histórica como agridulce.
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Eva Navarro y Claudia Pina, dos de las estrellas de las inferiores, claves en todos los éxitos. (foto: Getty Images) |
Y la última piedra, la que pone el broche de oro a este post, el Mundial Sub-17. Uruguay ha sido el escenario en el que las chicas de Toña Is volvieron a levantar el trofeo de campeonas, y en el que consiguieron un hito, como es el primer título del mundo de una selección femenina española.
Un año, un momento, que no olvidarán, sobre todo las que ya estuvieron presentes en el Europeo de mayo. Una de las que no pudo ir a Lituania pero sí estuvo en el país charrúa fue Claudia Pina. Y vaya si estuvo. Bota de plata y Balón de oro del Mundial, se resarció de su obligada ausencia en el Europeo por lesión, y fue evidente pieza clave en todo el campeonato del mundo.
Como ella, Eva Navarro y Cata Coll -guante de oro del torneo-. Dos jugadoras que han estado presentes en el campeonato europeo Sub-17, en el subcampeonato mundial Sub-20 y en este campeonato mundial Sub-17. Veteranía y galones con apenas 18 años. Llamadas a cosas muy grandes.
Corea del Norte -les ganaron a penaltis- y Nueva Zelanda fueron los escollos superados en cuartos y semis, respectivamente. Y por último, México no pudo en la final con una España embalada a por el triunfo, que en el 26' ya ganaba 2-0, con doblete de la letal Claudia Pina, y que supo aguantar tras el 2-1 de la azteca Denise Castro.
Después de tantos éxitos en las categorías inferiores, es coherente pensar en que esto se debe plasmar en la absoluta. En 2019 se celebra en Francia el Mundial, la gran cita del fútbol femenino. Cuatro años después de la debacle de Canadá 2015, Jorge Vilda tiene una oportunidad -y un deber- de oro para comenzar a introducir a las nuevas generaciones junto a las futbolistas consolidadas en el camino al campeonato del mundo.
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