LA FIESTA DEL FÚTBOL: MUNDIAL DE RUSIA 2018 (PARTE 3)

(foto: FIFA)

Tercera parte de nuestra previa de este Mundial, turno para los Grupos E y F.

GRUPO E

BRASIL, SUIZA, COSTA RICA y SERBIA protagonizan el Grupo E.

El último episodio de la selección brasileña en un Mundial aún hace llorar a todo un país. Ese sueño que se convirtió en pesadilla una tarde de verano en el Mineirão. Lo cierto es que las cosas han cambiado mucho, hasta el punto de que la selección carioca es la gran favorita para levantar el trofeo de campeón.

Brasil fue un absoluto rodillo en la fase de clasificación al Mundial. Con Tite al mando solo una derrota... y fue en un amistoso. Desde su llegada, los brasileños se mostraron imparables gracias a una nueva disposición y a decisiones tomadas de forma coherente y clara, y certificaron su billete con varias semanas de antelación. 4-3-3 es el esquema que utiliza Tite, con un medio del campo en el que prefiere la contención a la creación.

Alisson será el portero. El de la Roma ha sido el elegido siempre por Tite, a pesar de que en el banquillo esté Ederson, uno de los guardametas con mejor toque de pelota y pieza clave en el Manchester City. En la defensa, Danilo en el lateral derecho por la lesión de Dani Alves, que impide a este último viajar a Rusia y que ha hecho entrar a Fagner en la lista. Por el costado izquierdo estará Marcelo, siempre más atacante que defensor, con Filipe Luis esperando su oportunidad. El colchonero se recuperó de su grave lesión y estará al 100% en Rusia. En el centro de la zaga, Marquinhos y Miranda serán la pareja, habiendo desplazado a un otrora fijo Thiago Silva del puesto.

Casemiro, Paulinho y Renato Augusto son fijos en el centro del campo. Un "renacido" en el Barça, un campeón de Europa con el Real Madrid y otro que juega en China, en el Beijing Guoan. No es precisamente la mejor sala de máquinas que ha tenido la canarinha pero es en la que más confía Tite. Fernandinho (uno de los "antagonistas" del 1-7) y Fred serán sus recambios. Por delante, Coutinho y Neymar estarán en las bandas, con el del PSG asumiendo un papel "a lo Messi", con jugadores explosivos como Douglas Costa, Taison o Willian como posibles sustitutos. Y arriba, un chico que hace cuatro años, con motivo del Mundial 2014, pintaba las calles con los colores de la verdeamarela y hoy los defiende. Gabriel Jesús es, a sus 21 años, el mejor delantero centro de Brasil... con permiso de un Bobby Firmino que le disputará el puesto.

La seleção sueña con lo más grande. 16 años sin conquistar el mundo se hacen más largos si cabe con el episodio traumático de "su" Mundial. Los de Tite no se ponen techo. ¿Puede ser 2018 el año de la sexta?

Por cuarta ocasión consecutiva, la selección suiza participará en la cita mundialista. Los helvéticos, anfitriones en el año 1954, se han convertido en un habitual. Después de ceder el primer puesto de su grupo en la última jornada, los de Vladimir Petkovic lograron el pase en la repesca gracias a un único tanto frente a Irlanda del Norte. 

A pesar de las voces que intentar separar una selección compuesta por jugadores de distintos orígenes (Kosovo, Costa de Marfil, Cabo Verde, Camerún, Nigeria...), han mostrado en sus citas recientes, como en el amistoso ante España, ser un cuadro difícil de batir. Petkovic utiliza un esquema de 4-2-3-1 en el que intenta fomentar la unión como equipo, estando cómodos con la pelota para también al contraataque.

Yann Sommer, del Gladbach es el portero indiscutible, a pesar de que Roman Bürki, del Dortmund, esté entre los tres metas convocados. El flanco derecho estará ocupado por Lichtsteiner, que a sus 35 años cambiará Juventus por Arsenal y es el veterano y capitán del equipo. Por la izquierda el alma del equipo, un Ricardo Rodríguez que anotó el gol que dio el pase a Suiza al Mundial. Y en el eje, el deportivista Fabian Schär podría estar acompañado por el joven Akanji o Johan Djorou.

El gunner Granit Xhaka y el segundo capitán Valon Behrami formarán el doble pivote, con Dzemaili (o Freuler) en la zona de enganche y su estrella Xherdan Shaqiri -que marcó un gol de chilena en la Eurocopa 2016- en el costado derecho y el jovencísimo Embolo -21 años- o Zuber por la parte izquierda, debido a la lesión del que parecía favorito para formar en esa zona, Mehmedi. En la punta de ataque, el mejor posicionado para empezar de titular el torneo es el ex realista Haris Seferovic, a pesar de ser criticado por su falta de acierto en momentos claves. Tendrá que esperar su oportunidad Mario Gavranovic.

Alcanzar los cuartos de final, la barrera que tiene Suiza en su historia, parece una difícil empresa. Los helvéticos ya saben lo que es superar a un rival superior en la fase de grupos, como hicieran con España en 2010, cuando los españoles ganaron el Mundial. Alcanzar la fase del KO será el objetivo de Suiza.

Costa Rica retorna a la competición que le vio sorprender a los ojos del panorama futbolístico mundial. Hace cuatro años en Brasil todos vibramos con los ticos y sus hazañas, pasando a octavos como primera en un grupo como Italia y Uruguay y cayendo eliminada sin perder ningún partido. Cuatro años después, muchas cosas han cambiado, pero no las esperanzas costarricenses.

Óscar Ramírez es desde 2015 el seleccionador de Costa Rica, y ha mantenido la esencia que Jorge Luis Pinto acuñó en su equipo: una mentalidad principalmente defensiva para a partir de ahí empezar a construir de forma rápida y vertical. El esquema táctico que utiliza así lo atestigua, un 5-4-1 que mantiene su portería protegida.

Esa portería que defiende un guardameta de talla mundial como es Keylor Navas, campeón de las tres últimas Champions League con el Real Madrid. Bryan Oviedo será el carrilero derecho. Se perdió Brasil 2014 debido a una grave lesión cuando estaba en su mejor momento de juego. Este año, a pesar de descender con el Sunderland a Tercera, se ha mostrado positivo. El carrilero zurdo será seguramente Gamboa. Giancarlo González, el perico Óscar Duarte y Johnny Acosta serán los tres mariscales de la zaga.

En el centro del campo, en el doble pivote, el jugador del Dépor, Celso Borges, se encarga de ahorrarle el trabajo defensivo al veterano Christian Bolaños. A sus 34 años, ha llegado a Rusia tras superar una grave lesión. Por las bandas, David Guzmán asumirá el papel trabajador y Bryan Ruiz el de estrella de su selección. El jugador del Sporting CP no ha tenido su mejor año, pero Costa Rica no es la misma sin él. Rodney Wallace, Yeltsin Tejeda y Randall Azofeifa esperarán su oportunidad desde el banquillo. En la punta atacante, debido al largo tiempo de lesión que ha mantenido fuera de juego durante la mayor parte de la temporada a Joel Campbell, Marco Ureña es el favorito para comenzar en el verde. Su trabajo en la presión resulta fundamental.

Repetir lo hecho en el Mundial de Brasil, eso es lo que se proponen los ticos. Si ya se hizo una vez y en un, a priori, grupo más complicado, ¿por qué no hacerlo de nuevo?

Serbia regresa a un Mundial ocho años después de una actuación para olvidar en Sudáfrica. El primer choque de la competición supondrá tan solo el séptimo de Mladen Krstajic al mando de la selección. De hecho, los serbios lograron su billete con Slavoljub Muslin, después de superar a Irlanda, Gales o Austria en su grupo, pero una disputa con la estrella nacional se lo llevó por delante. Con Krstajic se complementó el esquema de 4-2-3-1, con una defensa experimentada y rocosa como el elemento más característico... que no único.

A pesar de contar con uno de los porteros jóvenes con más futuro como Rajkovic y uno de los revelaciones de LaLiga como el eibarrés Dmitrovic, el titular es Vladimir Stojkovic. A sus 34 años, uno de los máximos "traidores" -cambió Estrella Roja por Partizan, rivales acérrimos- del país tiene el puesto asegurado con 80 internacionalidades a sus espaldas. Las edades de tres de los que forman la defensa suman 100 años. Los 34 de Rukavina por el lateral diestro, otros tantos de Ivanovic en el eje central y los 32 de Kolarov por el lateral zurdo. Al ex del Chelsea le acompañará la pieza más joven, Nikola Milenkovic, que a sus 20 años forma parte de la Fiorentina y se hace un hueco por la baja de Nastasic. Existe la posibilidad de que el jugador viola comparta centro de la zaga con Uros Spajic, desplazando así a Ivanovic al lateral derecho y a Rukavina al banquillo. Así al menos ha sido en la última prueba.

En el doble pivote se encuentran dos futbolistas asentados, en su puesto y en la Premier League. Milivojevic y Matic, del Crystal Palace y del Manchester United respectivamente, son el sustento serbio en la sala de máquinas. Por delante de ellos, en la zona creativa se asienta ese hombre que tanto puede dar que hablar si se lo propone y si deja de lado su actitud, esa que le costó el cargo al anterior seleccionador. Sergej Milinkovic-Savic -nacido en Lleida- ha sido con la Lazio, a sus 23 años, uno de los mejores jugadores de la Serie A esta temporada. Tiene talento para regalar. El líder de la Serbia campeona del mundo Sub-20, y hoy en día de la absoluta.

Por la banda izquierda, otro jugador tan talentoso como rebelde, Adem Ljajic. Si opta por lo primero, el otrora objetivo del Celta puede ser pieza clave de los balcánicos. En el otro costado se asienta Dusan Tadic, el que viste el 10. Pieza clave en el Southampton y en la selección, aporta desequilibrio y gol. En el banquillo esperarán el red Grujic y Zivkovic, que pueden aportar mucho. Y arriba, un martillo pilón. No te acerques a él en la celebración de un tanto. Por tu bien. Aleksandar Mitrovic, o como a él le gusta que le llamen, "el Balotelli serbio" -dejando claras las intenciones- tiene su sitio fijo, y ha hecho méritos para ello. Fundamental en el ascenso del Fulham con sus goles, da aire a los ataques cuando sus compañeros lo necesitan. Pasional como pocos, alguna imagen nos dejará en Rusia, seguro. 23 añitos tiene la joya.

Pocos tienen en cuenta a Serbia en sus apuestas. No se le dan muchas opciones en este grupo, pero argumentos para creer que los tiene existen. En el país balcánico esperan, como mínimo, llegar a la fase del KO, lo que ya supondría todo un éxito. De suceder, lo normal en octavos sería Alemania, hueso más que duro, pero en Serbia creen mucho en los suyos.


GRUPO F

ALEMANIA, MÉXICO, SUECIA y COREA DEL SUR se verán las caras en el sexto grupo.


Actual campeona del mundo y de la Copa Confederaciones -esta última llevando a su "selección B"-, clasificación inmaculada al Mundial con solo cuatro goles encajados... Alemania es una máquina totalmente engrasada, fiable y efectiva que tiene un objetivo.

Todos conocemos a la selección de Löw. Inspirado en el buen trato del balón, el seleccionador intenta aportar siempre variantes diversas en la disposición de su equipo (con preferencia al 4-2-3-1), a la vez que diferentes jugadores. Al seleccionador no le ha temblado la mano para hacer debutar a cualquier futbolista que haya destacado -o para dejarlos fuera, como a Leroy Sané-. De hecho, la transición desde Brasil hasta Rusia es notoria. Solo 9 de los 23 repiten aparición mundialista.

A pesar de pasarse la gran parte de la temporada entre algodones por problemas en un pie, Manuel Neuer irá al Mundial para ser titular. No sabemos qué opina sobre ello Marc-André Ter Stegen. El del Barça ha hecho una grandísima temporada, pero se quedará sin el premio en su selección. Joshua Kimmich es fijo en el lateral derecho. En esa posición lo colocó Guardiola cuando era mediocentro y no se ha movido. A sus 23 años llega a su primer Mundial. Por la banda izquierda estará Jonas Hector, que aunque descendió con el FC Köln, mantuvo su nivel y tiene su puesto asegurado. En el centro de la zaga la pareja del Bayern, Jerome Boateng y Mats Hummels, inamovibles y fundamentales. Los jóvenes Süle y Rüdiger serán sus recambios de confianza.

En el doble pivote, Khedira es contención -y llegada- y Kroos es clase, toque excelso de balón y pase a la red si es necesario. Si alguno de ellos fallara, dos hombre de garantías aguardan su oportunidad. El primero es Leon Goretzka. A sus 23 años, está llamado a ser uno de los centrocampistas del futuro. El Bayern se lo ha llevado... gratis. El otro es Ilkay Gündogan. Las lesiones no le permitieron ir a Brasil, pero gracias a una temporada de ensueño con el Manchester City se ha vuelto a asegurar su puesto. Si hablamos de lesiones, tenemos que hablar de Reus. Los contratiempos físicos le han impedido estar en la Eurocopa 2012, Mundial 2014 y la Eurocopa 2016. Todo indica que el eterno futbolista del Dortmund será de la partida en el once ideal de Löw, junto al mago de la asistencia Özil y el hombre destinado a quitarle a Klose el récord de máximo goleador en los mundiales. Thomas Müller se convierte en un convertidor nato en esta competición. Por ahora lleva 10, Klose dejó el récord en 16. Si se le seca la pólvora, Löw podrá confiar en el líder de Alemania en la ConfeCup, Julian Draxler. Sin tantas oportunidades en el PSG, siempre ha demostrado su valía con Die Mannschaft. El último eslabón será Timo Werner, delantero del Leipzig. A sus 22 años ha demostrado con sus actuaciones ser el delantero más en forma de Alemania. Trabaja, se mueve de forma inteligente y marca goles. ¿El delantero moderno?

La selección alemana ha llegado, como mínimo, a semifinales en las últimas cuatro ediciones. Ese será el objetivo mínimo del cuadro, aunque nadie puede negar que en el seno de la Die Mannschaft se sueña con repetir victoria.


La relación entre México y su selección de fútbol es de amor-odio continuo. Lo cierto es que el irregular rendimiento de la tri es suficiente para que sea así. De ganar otra Copa Oro a caer ante Chile e una manera más que humillante por 0-7 a clasificarse sin apuros para el Mundial.

Capaz de lo mejor y de lo peor, parece claro que la palabra que define a la selección de Juan Carlos Osorio es irregularidad. Aunque regular es justamente lo que ha sido México en los últimos Mundiales. En Rusia veremos a una México que seguramente forme con un 4-3-3, aunque el seleccionador se abre a más variantes.

"Memo" Ochoa es a sus 32 años el portero más joven de entre los convocados y el indiscutible titular. Llama la atención el estancamiento de su carrera después de su enorme actuación en Brasil 2014. Por el lateral derecho estará Carlos Salcedo. Campeón de la Pokal alemana con el Eintracht, donde juega de central, posee un corte más defensivo. Diego Reyes y Héctor Moreno están asentados en la zona media de la defensa. Buen juego aéreo y seguridad defensiva. Por el costado izquierdo estará Layún, un hombre más ofensivo que Salcedo y que hemos podido ver en el Sevilla desde enero esta temporada. Aunque no va a ser un habitual, el káiser Rafa Márquez podría, a sus 39 años, jugar su quinto Mundial.

En el centro del campo, Héctor Herrera tiene las papeletas para ocupar el pivote, aunque el jugador del Oporto ofrece reservas en la opinión mexicana por sus dificultades posicionales. El veterano Guardado y el siempre criticado y eterna promesa Giovani dos Santos se colocarán en la zona de interiores, con el hermano Jonathan dos Santos o Marco Fabián esperando su oportunidad. El trío atacante estará compuesto por tres futbolistas vitales. "Carlitos" Vela, "Chicharito" Hernández y "Chuky" Hirving Lozano. El primero dejó atrás su etapa en la que no quería jugar con su selección para ser un fijo, el segundo es la estrella, máximo goleador de la historia del club, y el tercero es la estrella emergente, líder de un PSV campeón en Holanda en su primera temporada en Europa anotando 17 tantos. Javi Aquino, Tecatito Corona, Oribe Peralta y Raúl Jiménez como recambios.

Llegar por séptima vez consecutiva a los octavos de final es el gran objetivo mexicano. Además parece posible, en un grupo donde Alemania es la favorita distanciada pero sin un compañero predecible al 100% para las fases del KO. Llegar a cuartos -algo que podrían haber hecho en 2014 de no ser por el piscinazo de Robben- ya sería un sueño, con un posible enfrentamiento ante Brasil en octavos.


Después de quedar segundo, por delante de Holanda, en el Grupo A, Suecia se plantó en la repesca ante toda una Italia, aún por encima con el choque de vuelta en el país transalpino. Parecía que el camino de los suecos al Mundial se había acabado ahí. Nada más lejos de la realidad.

Un tanto de Johansson metió a Suecia en el Mundial, competición que no jugaba desde 2006, y dejó fuera de él a una Italia que no se la perdía desde hacía 60 años atrás. Y todo esto sin Ibrahimovic. Janne Andersson asumió la retirada de la estrella sueca y no le dejó volver cuando se ofreció, después de clasificarse al Mundial.

El seleccionador sueco, como muchos otros, ha puesto en la defensa la fortaleza de su equipo. Un 4-4-2 ordenado es el sistema por el que ha optado en la mayoría de las ocasiones. ¿Sus hombres? Robin Olsen, del Copenhague, se ha ganado el puesto bajo palos. El espigado portero -1,98 metros- sufrió una rotura de clavícula en febrero que no le impedirá ponerse los guantes en el Mundial. Los defensas son reconocibles al ojo del futbolero europeo. El lateral derecho será Mikael Lustig. Acostumbrado a ganar con el Celtic, es un fijo y uno de los veteranos del equipo. Ludwig Augustinsson recorre la banda izquierda. Ahora en el Werder Bremen, fue pieza clave en la Suecia campeona de Europa Sub-21 en 2015. En el eje de la zaga, el red devil Victor Lindelöf y el capitán Andreas Granqvist marcan la juventud y la veteranía. Sangre nueva y experiencia.

Albin Ekdal y Sebastian Larsson componen un doble pivote que cuando el primero falta por problemas físicos -y suele hacerlo- sufre de un claro déficit de calidad. Hiljemark, reemplazante más natural y capitán de esa Sub-21 campeona de Europa en 2015, no ha conseguido contar con toda la confianza del técnico. En la banda izquierda se sitúa lo más parecido a sucesor de Ibra en el papel de estrella, Emil Forsberg. Esta temporada ha sido un poco difícil para él debido a lesiones, pero sigue siendo el hombre clave en el ataque de los amarillos. Por la otra banda, el puesto se lo disputarán Durmaz y Claesson, con ventaja para el segundo. Arriba, cuatro hombres para dos puestos. Marcus Berg y Ola Toivonen, a pesar de que uno juegue en los Emiratos y el otro no lo haga en el Toulouse, cuentan con la confianza del seleccionador, que ha llegado gracias a sus años de experiencia y sus tantos con Suecia, por delante del popular atacante ex celtista John Guidetti -si no has escuchado su canción no vives en este mundo- y Kiese Thelin.

Teniendo en cuenta que Brasil es la teórica primera de grupos y la competencia que puede haber entre las otras tres selecciones, alcanzar la fase de eliminatorias sería todo un éxito en el país nórdico.


Cuando alguien nombra Corea y fútbol a muchos le recorren escalofríos por el cuerpo. Las semifinales y polémica de 2002 quedan lejos, pero más aún la última edición en la que los surcoreanos no estuvieron presentes. Desde México 1986 los asiáticos han estado siempre presentes.

Shin Tae-yong ha probado con varios esquemas, pero parece que se decidirá por el 4-4-2. En el ataque reside su mejor arma en cuanto a nombres, de tres cuartos para arriba reúne reconocibles jugadores. Tae-yong, que ha pasado por las inferiores de la federación surcoreana y cogió al equipo mediada la fase de clasificación después de ser asistente, tendrá la responsabilidad de unirlos a todos en sintonía en su primer gran torneo de selecciones.

Kim Seung-gyu es el cerrojo. El portero de 27 años del Vissel Kobe es un fijo desde su aparición estelar desde las categorías inferiores. Lee Yong, Jang Hyun-soo, Yun Young-sun y el veterano Park Joo-ho son los favoritos para conformar una línea defensiva a la que le gusta mostrarse en ataque, sobre todo por los laterales. Jugadores como Jung Seung-hyeon o Kim Min-woo se disputan los puestos con los antes nombrados. En el doble pivote acompaña Jung Woo-young al líder de esta selección. Ki Sung-yueng afronta su tercera Copa del Mundo en un momento complicado, tras descender con el Swansea, equipo en el que estuvo desde 2012 -con una temporada entremedias de cesión al Sunderland-, lo que habla de su dilatada experiencia al más alto nivel.

Por las bandas, dos perfiles semejantes pero con presentes distintos. Lee Jae-sung nombrado en 2017, a sus 25 años, mejor jugador de la K-League -la liga surcoreana-, aúna habilidad, creatividad y velocidad en todo el flanco atacante, aunque en este Mundial parece que lo hará por el costado izquierdo. En el derecho estará "el Messi surcoreano". El sueño de Lee Seung-woo de triunfar en el Barça se vio cortado -por ahora- cuando la sanción de la FIFA le dejó una temporada sin jugar. A veces con un carácter un tanto temperamental, Lee llegará a Rusia con tan solo 20 añitos, siendo una de las sorpresas en la convocatoria y tras haber descendido a la Serie B italiana con el Hellas Verona, donde su desparpajo y calidad no ha contado con la continuidad necesaria. En la punta compartirán posición Heung-min Son y Hwang Hee-chan. El del Tottenham ha dado un paso adelante esta temporada, jugando bien en cualquier posición del ataque -18 goles esta campaña-, mientras que el del Salzburgo ha dado una gran impresión en Europa, además de conquistar la Bundesliga en Austria, aportando 13 dianas y 4 asistencias.

A pesar de las bajas de Keun-ho Lee y Kwon Chang-hoon, en Corea del Sur están ilusionados con la posibilidad de alcanzar la fase de grupos, como hicieran por última vez en Sudáfrica. Si la suerte sonríe -y Son está inspirado-, por qué no una Corea en octavos. En semis ya no, tampoco nos pasemos.